lunes, 21 de junio de 2010

El Lugar de Augé

Las ideas no existen en la naturaleza, están han sido forjadas por el ser humano a lo largo de su historia. Los conceptos nociones, normas, tradiciones, etc. Son construcciones culturales por no ser naturales, sino ideas humanas, no existieron siempre, sino que el hombre las ha moldeado.
El “Lugar” para Marc Augé es una construcción cultural, la delimitación de un área se hace siguiendo patrones culturales que han ido variando a través de la historia (la vara, el metro, la yarda, la yugada, el área, la hectárea, la manzana, el lote…). Con ello no queremos desvalorar la delimitación del área de un estudio: estamos inmersos dentro de nuestra cultura, nos valemos de ella para entender al mundo y pretender salir de ella es imposible sin caer en contradicciones. Más bien al denotar el carácter constructivo del Lugar damos relevancia a la comprensión de la identidad, sin negar su existencia. La delimitación es importante para poder entender otras nociones (o construcciones culturales), como decía James Clifford: para entender a una cultura tenemos que referirnos a nuestra propia cultura. El primer paso, propongo yo, es no negarnos, no alienarnos para de esta forma tener un referente con el cual comparar y hacer descripción densa. La mejor forma de hacer antropología es comparando lo que hacemos con lo que los otros hacen, en este caso, como organizan su vida en torno al área o terreno que se crea, que creamos, como nos relacionamos con éste.
Al asumir en la postura se corre el riesgo de la contradicción permanente, así por ejemplo al pensar que la ciencia es un conjunto de ideas y como toda idea no es más que una construcción, el hecho de usar la ciencia es ilógica si se quiere tomar algo que sea concreto y fundamental. Pero aquí no nos ubicamos en algo estable, se ve la ciencia desde un punto de vista no científico, literalmente desde un lugar en el aire. Al no tomar una postura sólida incurrimos pues, como ya señalé, en contradicciones insalvables. ¿Cómo puedo entender a quien considera como su madre a su tierra, sin compararlo con la idea de madre que tenemos nosotros? ¿Cómo puedo entender a los otros sin entenderme primero a mi?

jueves, 6 de mayo de 2010

pluralidad

Siempre buscamos la verdad, en lo que sea. Tenemos el derecho a conocerla y también a iniciar su búsqueda por nuestra cuenta o en conjunto. En la historia encontramos mártires de al verdad, quienes dieron su vida por atreverse a conocerla, a buscarla.
Pero ¿Qué es la verdad? Los cristianos dicen que la verdad es Cristo, los musulmanes Alá, los ateos lo material. Cada uno piensa y cree en la verdad según sus convicciones y argumentos, por lo cual la verdad se vuelve relativa, lo querramos o no, no hay verdad absoluta. Ante ello y ante nuestros propósitos (investigar, lograr el desarrollo etc.) no nos queda más que discutir y llegar a acuerdos, y para ello se necesita tolerancia. P-L-U-R-A-L-I-D-A-D significa tolerar, dejar que el otro también hable y exprese sus ideas para contribuir con un objetivo común. En lugares donde no exista pluralidad, no se avanza, nos quedamos empantanados con las mismas ideas, con las mismas acciones y sus errores, repitiéndose una y otra vez, porque no existe consenso sobre nuevos métodos que vallan más allá de lo que uno mismo (o un grupo) piensa. Mi solidaridad con la PUCP.

martes, 27 de abril de 2010

CULTURA POSMODERNA: ¿PREDOMINIO DE LA ESTETICA SIN SIGNIFICADO?

Estaba leyendo un libro sobre consumo, y en este se ve al posmodernismo no como un conjunto de ideas, sino como una etapa de la historia o al menos de esta época de la historia en donde predomina una cultura del consumo. Entonces en vista a estos los teóricos posmodernos (que en el libro los distingue muy bien con la época) sustentan el fin de la suprema importancia de las clases sociales y el factor netamente productivo en el sistema societal. Ahora, sostiene el autor basándose en los escritos de diferentes autores, hay una cultura menos significativa que antes, vivimos en un mundo desbocado con un sentido difuso, que no se deja comprender. La política y el estilo de vida capitalista ha dado sus frutos en ésta época de la historia: la cultura del consumo.
Si tenemos en cuenta que la cultura es “una urdidumbre de significados” (Geertz) Yo me pregunto, ¿desde cuándo el hombre puede vivir sin cultura? El ser humano es un ser social, para poder sobrevivir tiene que estar asociado a algo o alguien, de en su carácter formal e informal, siempre estamos interrelacionándonos, y para ello, se necesita un lenguaje: un conjunto de símbolos que se cuyos significados se entiendan entre las partes. No existe ser humano sin cultura, a menos que sea alguien en estado vegetal y no pueda comunicarse por ningún medio.
¿El consumo no tiene cultura?, hay cultura (y significado) hasta en la presunción, además de que todo tiene un uso; claro que la mayor parte de las veces el significado no es absoluto, no es una verdad universal, ni le interesa a todos; y no deja de ser cultura. La estética es relativa, como también su significado, sucede ahora que hay nuevas formas de ver a la humanidad y ya no desde la postura vanguardista, aunque cada quien busca lo suyo, la sociedad no deja de ser sociedad.
Yo creo que las consecuencias perversas de la modernidad van más con los valores, pero en diagnosticar el comienzo del fin de la humanidad, me parece ilógico. Añado más bien, desde antes de los derechos humanos, la moral ha estado cambiando: tenemos que encauzar nuestros esfuerzos para que éstas mejoren, ojo que no digo que los DDHH sean “una cojudez” histórica, sino que son un hito por la mejora de la humanidad.

lunes, 22 de marzo de 2010

LA ETERNA CRISIS ANTROPOLÓGICA

Si alguien busca en google “antrologia” no va a encontrar mi blog, ¿Por qué? Porque esta no es el blog oficial de la facultad, de mi querida (y a veces renegada) facultad. Es más, si están pensando que estoy escribiendo choborradas, o sea tonterías que no les va a servir en sus dizque esforzados estudios, se equivocan nunca fue mi objetivo ayudarles en nada. Tampoco estoy empecinado a publicar noticias, ni ganar clientes. Menos les voy a recomendar donde buscar trabajo después de terminar la carrera.
Estaba buscando un trabajo antropológico rondando por aquí y allá, cuando me di con que: no había. Me puse a reflexionar. Toda la parafernalia de la crisis antropológica podría resumirse en la práctica (gira en torno a un eje ideológico) como: una ciencia poseedora de un campo laboral que es, para desgracia de quienes amamos esta ciencia, muy corta, muy ingrata y encima caprichosa. Aquí presento un argumento más, desde un punto de vista discursivo.
Ya se ha repetido hasta el cansancio que la antropología es una ciencia fuera de lo común, algunos ni siquiera la consideran ciencia, en especial dentro de la antropología cultural. No somos como los otros, somos los más reformistas, los más complicados, y acaso quizás, los más románticos entre las ciencias sociales: la misión del antropólogo es explicar, es hacer trick description para que la humanidad, (o al menos quienes tienen interés en ella) se entienda entre sus integrantes. Tomamos como objeto de estudios la cultura y la sociedad, el hombre y su existencia: vemos la economía y las ciencias puras como parte o una forma de ser, de estar en el mundo, una forma más entre otras que podría y existen. De estas conclusiones tan sublimes pero volátiles ¿a qué empresa se le ha ocurrido contratar un antropólogo, salvo para que les oriente en un campo que quieren explotar, como las mineras por ejemplo?
Según Arturo Escobar nuestra crisis comienza y acaba con la creación de la antropología. Sus lineamientos éticos chocan con la sociedad etnocéntrica (cualidad social extendida universalmente) que crea trabajo etnocéntrico, con moral cuasi totalitarista; hablo pues del Desarrollo.
No quiero ser radical; si bien Escobar considera al desarrollo y todas sus formas como un discurso al cual tenemos que examinar y luego cambiar de estrategia para hallar el bienestar, también debemos ser realistas. ¿De qué y cómo podemos vivir si salimos del discurso? Esta sencilla pregunta es el gran pero a la lucha antidiscursiva. Los antropólogos del desarrollo tienen que luchar dentro del discurso con sus reglas y normas ya establecidas, una misión suicida, o peor un suicidio en masa después del cual los participantes no saben qué vendrá.
Para mal de todos aquellos que no quieren meterse en estos líos (si, tú que ni sabes que significa estructuralismo, tú que no creo que estés leyendo estas líneas), son víctimas inocentes de esta gran desgracia que nos acaece debido a las contradicciones de la gran mayoría de teóricos y maestros de esta ciencia, románticos irrealistas, poco pragmáticos.
Lo único que nos une a la antropología es un amor visceral, un amor enfermizo, retorcido que tenemos por el conocimiento y ansias de conocer y entender al mundo tan odiado y amado a la vez. Nuestro ganapán ya no es antropológico: la mayoría de mis compañeros egresados se involucran de lleno en la burocracia, la más deshumanizante de las tareas pro-liberatorias. Y la otra minoría no sé qué hace.

miércoles, 20 de enero de 2010

17 CONEAN:: BLOG





Y por fin se abrió el blogggggg del CONEAN de este año, creado por Maurrick producciones. Aun está en construcción, pero esperemos sea mejorado XD
Yo mientras tanto sigo estudiando a Foucault.

http://www.xviiconean2010.blogspot.com/